Cuando se reúnen los Obama y la realeza europea se tiene los ingredientes perfectos para convertirse en un éxito. Pero si se trata de las cenas de homenaje a los premiados en los Nobel (en Suecia y Noruega), la ocasión se convierte en una velada perfecta con altas dosis de glamour.
La nota hollywoodiense corrió a cargo de Will Smith y su mujer, Jada Pinkett-Smith (con un espectacular abrigo de plumas), que apoyaron a Obama en esta ocasión.
La reina Sonia de Noruega con un vestido más sencillo que resaltaba su belleza nórdica en su etapa de madurez.
La reina Silvia de Suecia aportó el toque de madurez, con un estilo mucho más sobrio pero igualmente elegante.
Magdalena de Suecia, con un 'look' más clásico que su hermana. Tonos verdes, vestido de cola y encajes... Digna merecedora del Nobel de la Moda.
La princesa Victoria de Suecia es una de las mujeres más elegantes de europa. Su belleza y simpatía no eclipsaron un vestido en tonos violetas y corte moderno.
Para acompañar a su marido en su saludo desde el balcón, la primera dama combinó su vestido con un elegante abrigo con volantes que la protegía del frio.
Michelle Obama, con un vestido de cuerpo ajustado y falda de volantes. Tiene un estilo propio que la convierte en una de las más elegantes.
La princesa Mette-Marit causó sensación en la cena celebrada en Suecia. Su secreto: un vestido sobrio, como requería el acto, a la par que moderno, como requiere su juventud.
La nota hollywoodiense corrió a cargo de Will Smith y su mujer, Jada Pinkett-Smith (con un espectacular abrigo de plumas), que apoyaron a Obama en esta ocasión.
La reina Sonia de Noruega con un vestido más sencillo que resaltaba su belleza nórdica en su etapa de madurez.
La reina Silvia de Suecia aportó el toque de madurez, con un estilo mucho más sobrio pero igualmente elegante.
Magdalena de Suecia, con un 'look' más clásico que su hermana. Tonos verdes, vestido de cola y encajes... Digna merecedora del Nobel de la Moda.
La princesa Victoria de Suecia es una de las mujeres más elegantes de europa. Su belleza y simpatía no eclipsaron un vestido en tonos violetas y corte moderno.
Para acompañar a su marido en su saludo desde el balcón, la primera dama combinó su vestido con un elegante abrigo con volantes que la protegía del frio.
Michelle Obama, con un vestido de cuerpo ajustado y falda de volantes. Tiene un estilo propio que la convierte en una de las más elegantes.
La princesa Mette-Marit causó sensación en la cena celebrada en Suecia. Su secreto: un vestido sobrio, como requería el acto, a la par que moderno, como requiere su juventud.
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